jueves, 7 de junio de 2018

Los luchadores jamás se rinden

Cuando vamos transitando la vida, muchas veces -y en el mejor de los casos- maduramos nuestras ideas y cambiamos nuestra manera de ver las cosas, de interpretar la vida. Hoy es un día especial vísperas de mi cumpleaños número treinta y siete, estoy más que complacido con este tramo vital, lleno de experiencias maravillosas y felices pero también de las otras, ésas que te enseñan a ser fuerte, o más listo, las que te dejan lecciones para poder ser más feliz. Pese a esto -que ya de por si es algo que vale la pena y cada uno sabe porqué, lo más importante personalmente para mí es hallarle el sentido a la vida, descubrir mi misión.

Entre las cosas mas importantes para mí están el amor y una misión a concretar movilizado por este sentimiento. Sea en la responsabilidad y el disfrute que permite nuestra familia, como nuestros sueños, nuestros trabajos, nuestros pequeños objetivos cotidianos.

He sido bendecido por Dios con este don que me permite escribir y cristalizar mis ideas, compartir mi filosofía, y dejarla en mis libros. Esa es parte de mi misión, el sentido. No seré perfecto -como todos- pero busco vivir con la mejor versión de mi mismo. Vivir por mi y para mí, pero sabiendome inmerso en un mundo lleno de seres humanos, por ende imposible ser egoísta, imposible no vivir socialmente y contribuir de alguna manera -aunque sea pequeñísima- a mejorar -con actividades sociales o políticas- al menos mi entorno.

Por las experiencias he aprendido a ser paciente, pero no quedarme sentado a esperar que lleguen las cosas, que puedo hacer una cosa a la vez - y es lo más ideal-  o hacer varias cosas -te estresa pero al final a muchos nos resulta eso de "ganar tiempo"-; que debo descansar -poner stop cada tanto y relajarte- he aprendido a fortalecer mi espíritu, a resistir, a caerme y a levantarme para continuar el camino hacia adelante, he aprendido a luchar sin cansancio, he aprendido a buscar la felicidad y a vivir el presente -planificando y construyendo el futuro-, aprendí a no ser un estereotipo -innovar, reinventarme, hacerlo todo, sorprender, no  encasillarme, disfrutar a pleno y vivir en libertad- sobre todo aprendí a soñar que todo es posible...

Hay muchas personas que me inspiran lucha: mi familia - toda-; mis amigos y colegas por trabajos y por la literatura -de todas las áreas donde participo- y aquellos gigantes que también dejaron -y dejan- huella en este mundo.

Me puedo bajonear, deprimirme fugazmente, pero sigo siempre procurando una sonrisa, levantándo la frente y creando, porque -como cierro mi libro "Sombras y Conjuros. Es el momento de redimirse"-: "Los luchadores jamás se rinden".




Comparte, viraliza, difundamos el espíritu luchador.
Conoce más de Sombras y Conjuros en: www.leonelalvarezescobar.com.
Visita el Fanpage en Facebook: Sombras y Conjuros. Es el momento de redimirse... 
(C) Leonel Alvarez Escobar, 2014. Ed. Dunken, Bs. As.
Locución: María Laura Storani.
Algunos de #MisLuchadores, por orden de aparición: - Ana Frank - Atahualpa Yupanqui - Aung San Suu Kyi - Dr. Esteban Maradona - Jesús de Nazaret - Madre Teresa de Calcuta - Mahatma Ghandi - Malala Yousafzai - Gabriel García Marquez - Nelson Mandela - Oscar Wilde - Dr. Renè Favaloro - Rigoberta Menchù - Emma Moroncini - Valerie Solanas - Nick Vujicic - Oscar Pictorious. Y cuantos cientos y cientos de luchadores me quedan... miles son anónimos o están aún en las sombras. Bendiciones a ellos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario